Hoy, cuando iba de camino a mi trabajo caminando por las calles de mi ciudad -tengo la suerte de poder ir andando tranquilamente unos 10- 15 min- me he cruzado con un hombre feliz. Si, un hombre feliz. Es raro, en estos tiempos que corren, verdad?. Y a las 8 de la mañana...cuando todos vamos más o menos jodidos(y perdonen la expresión) por el madrugón y las prisas. Iba paseando con las manos en los bolsillos, y sonreía de una manera que transmitía eso, ...felicidad, reposo, paz,...Miraba al suelo y vestía holgado, con un vaquero y una sudadera gris, y su pelo era descuidado, medio canoso y rizado, aunque corto. Rondaría los 40.
Realmente parecía pensar en algo bueno que los demás no llegamos a entender.
Y eso que no sabía que hoy íbamos a contar con la noticia de que por fin ETA entrega las armas.
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